Después de que Michael fuera expulsado del instituto, su padre intervino y le habló sobre Job Corps. Él conocía el programa de primera mano, ya que se había graduado en Earle C. Clements Job Corps en la década de 1980. Así que, siguiendo el consejo de su padre, Michael se marchó de Miami para comenzar su formación en artes culinarias en la antigua escuela de su padre.  

La estructura del programa de Artes Culinarias resultó ser justo lo que necesitaba, y Michael afirma que sigue viviendo de la misma manera, procurando hacer todo a tiempo.

"No estaba acostumbrado a tener tantas reglas en mi vida", dijo Michael. "Hacía lo que quería cuando quería. Cuando llegué al campus, pensé: ¿Qué? No voy a hacer todo esto. Pero lo hice".  

La estructura ayudó a Michael a convertir su pasión y amor por la cocina en una profesión.

"Ahora soy chef, y todo lo que aprendí en Job Corps es exactamente lo que sigo haciendo ahora. He hecho todos los trabajos en un restaurante... y lo aprendí todo en Job Corps". 

Por mucho que le ambicione su carrera culinaria, una de las verdaderas pasiones de Michael es orientar a jóvenes afroamericanos. Ambas cosas van de la mano en su negocio. Contrata a muchos estudiantes de secundaria para que trabajen con él y actúa como su mentor, enseñándoles habilidades culinarias y mostrándoles que tienen todas las puertas abiertas para triunfar en el mundo.

Ahora Michael está muy ocupado. Es jefe de cocina en una residencia para personas mayores, propietario de su propio negocio de catering y padre, pero no se detiene ahí, ya que tiene la mirada puesta en un Food Truck.